El tiempo en nuestras manos

Caminamos por las calles persiguiendo el cielo eterno.

Un cielo que a veces era mar

y otras luz en movimiento.

El tiempo pasado parecía una vida entera.

¡Qué insignificantes fueron nuestros recuerdos hasta entonces!

Dejamos escapar los años con cada paso,

al compas de una melodía escurridiza.

Caminamos por las calles persiguiendo el cielo eterno.

Un cielo que no se quería ir.

Nuestras manos hablaron de todo aquello

que las palabras quisieron disfrazar.

Y el tiempo se sentó junto a nosotros

y nos susurró:

“Ba-by, when you told me good bye, with a smile in your eye.

Oh ba-by I had to laugh

so that I wouldn´t cry”

Aspiramos la suavidad del humo

y el cielo seguía ahí

como el mar,

como la luz en movimiento.

Autora: Patricia Bernardo © 2024.

Imágen: Stockholm. Mosebacke.

Música: «Mis´ry and blues». Jack Teagarden.

2 comentarios

  1. Buenos días Patricia, admiro el manejo que tienes de las palabras, para saber utilizar las justas y, con pocas, decir tanto.
    Saber abreviar y elegir lo apropiado, es un arte y tú lo tienes

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

SUSCRÍBETE AHORA

Loading
WhatsApp
Email